Una de las pruebas a favor de las posibilidades que
encierran el entorno y el lenguaje de los cómics son las ediciones ilustradas
del Manifiesto Comunista de Marx y Engels. El grafismo y las viñetas al
servicio de la difusión de ideas. Un poco en la línea del proyecto que dicen
que tuvo el cineasta Eisenstein: filmar en imágenes Das Kapital. Solo
que el Manifiesto es más llevadero, y el lenguaje gráfico permite otras
cosas.
Se han hecho varias versiones ilustradas o en cómic del
manifiesto. Yo conservo un ejemplar de la que probablemente sea la primera
edición en castellano:
La expresión "Sólo para adultos" que figura en la
portada responde a una legislación de la época. Hoy en día, en general, esa
expresión -"Para adultos"- se refiere a otra cosa. De la cual también
hay buenas muestras en el mundo del cómic.
No hay comentarios:
Publicar un comentario