La mente de los intérpretes de historieta es una especie de teatro por el que desfilan las representaciones que el cómic exhibe y aquella percibe. En este acto perceptivo las imágenes y la mente se funden en un horizonte afín al plano de la inmanencia postulado por el empirismo transcendental.
Se podría aducir que en las Galerías de ilustraciones que como propina se encuentran al final de algunos libros de cómic ―generalmente en ediciones de lustre―, la mente del espectador y lector de tebeos puede navegar por el océano que se extiende entre el proyecto del dibujante y el resultado finalmente impreso. Pero en este caso habría que postular la existencia en esa mente de imágenes fantasma intermedias que enlazasen, a manera de puentes, los bocetos iniciales con las versiones finales. Es una postulación que no deja de ser problemática, ya que uno de los límites del empirismo lo proporciona precisamente la verificación de la existencia de los fantasmas (si acaso tan solo podemos, con un grado mayor o menor de condescendencia, reconocerla). Benoît Peeters (en Lire la bande dessinée) apela a una case fantôme o viñeta virtual construida por el lector, la cual daría cuenta de la compleción de ciertas secuencias. Pero es una cuestión debatida.
Así, en el espacio que media entre los primeros bocetos, los dibujos a lápiz, el entintado, la aplicación del color y la versión finalmente impresa de cada viñeta o plancha de cada uno de los ejemplares distribuidos, en ese espacio ideado, el espectador puede interponer cuantas imágenes fantasmáticas quiera. En este caso, no solamente representaciones que conciban los procesos inherentes a estas fases de la producción, sino imágenes coherentes ―aunque en calidad de fantasmas― con el propio relato representado.
(Las ilustraciones que iluminan esta entrada corresponden a "El sueño de una noche de verano", con guion de Neil Gaiman dibujado por Charles Vess y coloreado por Steve Oliff.)
Se observará que, pese a su apariencia representacionalista, este planteamiento tiene en cuenta la ladera pragmática y su incidencia en la interpretación de los cómics.
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