Una de las claves del éxito de las artes, también o incluso
más en esta era en que ya han perdido el aura que las conectaba con lo sagrado, descansa en su capacidad de asombrar al que las recibe.
A mí me ha asombrado 99 Ejercicios de Estilo, del
neoyorquino Matt Madden (n. 1968).
La traducción literal del título original de este libro revela
su contenido: 99 formas de contar una historia. Esto es, dada una corta
historieta inicial en ocho viñetas que ocupan una página:
el autor propone otras noventa y ocho variantes formales de
la misma historieta. Por ejemplo, una de esas versiones o ejercicios está
realizada en estilo Línea Clara:
otra en estilo Comix Underground:
en estilo Superhéroes:
y así sucesivamente.
Según declara el propio Matt Madden, la idea, la inspiración
de este cómic procede de un libro ya clásico de 1947 escrito por el francés
Raymond Queneau: Ejercicios de estilo.
25.10.2013
Refiriéndose al libro de Raymond Queneau que es la fuente de
su inspiración, Matt Madden escribe:
En cuanto leí 'Ejercicios de estilo' pensé que sería divertido y, todo un reto, aplicar esa idea a la narrativa visual,...
Ya el libro de Queneau sugiere un cierto alejandrinismo en
el que el juego y la experimentación formal constituyen el núcleo del proyecto.
Y el libro de Madden no sería más, entonces, que el rizo de un rizo al
trasponer al lenguaje del cómic la aventura literaria y experimental de
Queneau.
Sin embargo, más allá de esta constatación, queda por
resolver un dilema. Y es que no sabemos si estas variaciones experimentales son
un mero juego formalista o formal que revela un agotamiento creador y estético,
o es más bien al contrario, de modo que estos ejercicios de estilo son como una
ventilación de las enormes posibilidades estéticas implícitas en cualquier leve
fragmento de la vida.
En el caso de optar por el segundo cuerno del dilema,
desbarataríamos además esa dicotomía escolar que distingue y separa entre el
fondo y la forma en las artes; una posición esta que recuerda aquella otra de
Paul Valéry que afirmaba que lo más profundo es la piel. Y que es, por cierto,
la que Matt Madden asume:
Espero que esta obra, en vez de repetir la eterna batalla
entre la forma y el contenido, el estilo y la sustancia, ponga en tela de
juicio esas gastadas dicotomías y sugiera un modelo diferente: la forma como
contenido, y la sustancia inseparable del estilo.
Lo cual no quita que Ejercicios de estilo sea un
excelente manual de aprendizaje de lectura y de escritura, tanto aplicado a la
literatura (Queneau) como al cómic (Madden).
No hay comentarios:
Publicar un comentario